Mapoteca Manuel Orozco y Berra

Plano Ygnográfico de la ciudad de México

El conde de Revillagigedo, virrey de 1789 a 1794, emprendió vastas mejoras y reformas en la Nueva España, incluyendo una modernización de la ciudad de México: abasto de agua, drenajes, saneamiento, empedrados, alineamiento de las calles, impuestos a los dueños de fincas. Para este fin contó con el arquitecto Ignacio Castera, autor de obras icónicas de la ciudad como el acueducto de Chapultepec (junto con su padre), el Salto del Agua, el antiguo colegio de la Enseñanza, el templo de Loreto y la iglesia y convento de las madres capuchinas en la Villa de Guadalupe. En su capacidad como maestro mayor de la ciudad, Castera levantó en 1794 dos planos de la ciudad de México que se conservan, uno para fijar las contribuciones según tres clases de terrenos, y el segundo, el Plano ignográfico de la ciudad de México (ignográfico se refiere a traza o planta), que ahora presentamos.

Este plano muestra lo existente con miras a su conservación o transformación. Como se lee en la Explicación: “Lo encarnado demuestra lo interior de la ciudad y que están sus calles rectas; Lo amarillo subido, las casas mal formadas que hay en los barrios; Lo amarillo claro, la situación de las manzanas que deben irse fabricando”. Se señalan igualmente las entradas de agua y los desagües (tarjeas), puentes y plazas existentes y por fabricarse.

En la Biblioteca Digital Mundial figura una copia de este plano, con algunas modificaciones en el texto y detalles diferentes en el mapa, por Manuel Ignacio de Jesús del Águila, tambien de 1794.

Bibliografía

Regina Hernández Franyuti, Ignacio de Castera, arquitecto y urbanista de la Ciudad de México. México, Instituto Mora, 1997.

Manuel Orozco y Berra, Historia de la ciudad de México, desde su fundación hasta 1854. México, SEP, 1972 (SEPSetentas, 112).